LA SALA DE AUDICION...
Publicado: Mié Jul 06, 2011 8:36 pm
... o el porqué dentro de un coche jamás puede haber buen sonido, por mucha parafernalia y muchos watios y muchos altavoces que se le ponga. OJO: TOCHO GORDO, aunque interesante:
Partimos del siguiente enunciado: Una frecuencia determinada no puede ser fielmente reproducida en un recinto cuya dimensión máxima es inferior a la mitad de su longitud de onda.
Esto, que resulta "impepinable", quiere decir que (sabiendo que la longitud de onda se halla dividiendo la velocidad del sonido por la frecuencia correspondiente) para escuchar como Dios manda la tan famosa frecuenia de 20 Hz necesitamos un local de, por lo menos, 8,5 metros de largo (340/20/2=8,5).
Afortunadamente, muy pocos tenemos los oidos capaces de percibir los 20 Hz.Yo me quedo en los 40. Pero, a pesar de eso, resulta que 340/40/2=4,25 metros de largo. Pocas habitaciones tienen esa longitud.
Para ahorraros calculos, va una tabla con los valores más "puñeteros"(Que corresponden a las frecuencias más bajas):
1Hz=170m(Esto como curiosidad)
10Hz=17m
20Hz=8,5m
25 Hz=6,8m
30Hz=5,6m
35Hz=4,8m
Otro factor a tener en cuenta es el tema de la reverberación. Surge como consecuencia de que en un recinto cerrado el sonido llega al receptor por dos vías distintas: Directamente desde la fuente y rebotado por las paredes. El sonido rebotado, debido a la mayor distancia que recorre, llega retrasado y más débil con relación al directo. Puesto que rebota sobre todas las superficies y se encuentra con materiales de distonto grado de absorción, este sonido reflejado se seguirá oyendo durante un tiempo más o menos largo, atenuándose de forma progresiva. A ello se le llama "tiempo de reverberación", y tiene cifras: El tiempo de reverberación es el tiempo que tarda una onda sonora en atenuarse 60 dB, que equivale a una millonésima parte del nivel inicial.
Por tanto, es fácil deducir que mientras mayor sea la sala y menos absorbente su superficie, ese tiempo será más largo. Hay lugares en los que ese tiempo de reverberación puede durar mas de 5 segundos, con lo que ya estamos ante lo que se denomina ECO, que es el caso extremo de reverberación.
En una sala de 50 o 60 metros cúbicos (bastante comun) el tiempo de reverberación ha de ser inferior a 1,5 segundos, pero mayor de 0,5 segundos. Menos de eso tampoco es recomendable, porque en ese caso el sonido queda ahogado y poco natural.
Como en la mayoría de los casos resulta inviable modificar las dimensiones de la habitación, lo normal es que se manipule en el campo de la absorción de sus elementos, para ajustar los tiempos de reverberación. Lógicamente, cuanto más grande sea la sala, más absorción se necesita para obtener esos deseados 0,5 segundos. Esto se puede hacer perfectamente con materiales domésticos, sin tener que recurrir a los carísimos elementos que tratan de encasquetarnos los fabricantes especializados en eso que ya todos sabeis. Va una tabla, con materiales muy comunes, y su coeficiente de absorción en segundos. Los valores son por metro cuadrado de material:
UNA PERSONA= 0,4
MOQUETA O ALFOMBRA=0,8
PARQUET DE MADERA=0,03
SUELO SINTETICO=0,04
PARED DE CEMENTO O LADRILLO=0,025
PARED ENLUCIDA O EMPAPELADA=0,04
VENTANAS, CUADROS, ESPEJOS=0,03
CORTINA FINA=0,4
CORTINA GRUESA=0,55
UNA MESA=0,55
UNA COMODA=0,8
UN SOFA TAPIZADO=0,9
UN SILLON TAPIZADO=0,5
Otro factor son las ondas parasitas y estacionarias. Surgen cuando hay paralelismo entre los planos que forman la habitación: Paredes, suelo y techo. Cuando una onda rebota perpendicularmente a una de ellas, se crea un vaiven entre la superficie paralela, cuya duración puede ser muy larga y depende de la capacidad de absorción de dichas superficies. Se crea un efecto de "ping-pong" bastante desagradable de escuchar. Nuevamente se impone el uso de materiales absorbentes o de elementos que rompan el paralelismo, haciendo las superficies irregulares: Lamparas, cuadros, muebles...
Por último, hay que hablar de la resonancia: Es un fenómeno que se produce porque todos los objetos (incluida la propia sala) tienen una tendencia a oscilar(vibrar) a una determinada frecuencia. Esta frecuencia depende del material y de las dimensiones de dicho objeto.
Para evitar que la sala en sí resuene, hay una regla en acústica que da bastantes buenos resultados con los materiales comunes que se emplean en construcción. Es la siguiente: 1x1,6x2,5.
Por ejemplo: Para una altura de 2,40 metros, el ancho debería ser de 3,84 metros y el largo de 6 metros.
En cuanto a los elementos de la sala (muebles, cuadros, etc) hay que desacoplarlos, colocando piezas de goma bajo las patas de los muebles, masillas elásticas para los cristales en las ventanas, fieltro bajo los pequeños objetos... no obstante, bien es verdad que mientras más masivo sea un objeto más difícil es que entre en resonancia.
CONCLUSION/REGLA DE ORO: Tengan todos en cuenta que siempre sonará mejor un equipo mediocre en una sala con buena acústica que el mejor equipo del mundo en una sala mala. Esto, que parece una gilipollez, porque es harto sabida, no lo es tanto porque sabemos que muy pocos la tienen (tenemos) en cuenta... ¿O es mentira lo que estoy diciendo?. Que tire la primera piedra el que sea!!!...
Partimos del siguiente enunciado: Una frecuencia determinada no puede ser fielmente reproducida en un recinto cuya dimensión máxima es inferior a la mitad de su longitud de onda.
Esto, que resulta "impepinable", quiere decir que (sabiendo que la longitud de onda se halla dividiendo la velocidad del sonido por la frecuencia correspondiente) para escuchar como Dios manda la tan famosa frecuenia de 20 Hz necesitamos un local de, por lo menos, 8,5 metros de largo (340/20/2=8,5).
Afortunadamente, muy pocos tenemos los oidos capaces de percibir los 20 Hz.Yo me quedo en los 40. Pero, a pesar de eso, resulta que 340/40/2=4,25 metros de largo. Pocas habitaciones tienen esa longitud.
Para ahorraros calculos, va una tabla con los valores más "puñeteros"(Que corresponden a las frecuencias más bajas):
1Hz=170m(Esto como curiosidad)
10Hz=17m
20Hz=8,5m
25 Hz=6,8m
30Hz=5,6m
35Hz=4,8m
Otro factor a tener en cuenta es el tema de la reverberación. Surge como consecuencia de que en un recinto cerrado el sonido llega al receptor por dos vías distintas: Directamente desde la fuente y rebotado por las paredes. El sonido rebotado, debido a la mayor distancia que recorre, llega retrasado y más débil con relación al directo. Puesto que rebota sobre todas las superficies y se encuentra con materiales de distonto grado de absorción, este sonido reflejado se seguirá oyendo durante un tiempo más o menos largo, atenuándose de forma progresiva. A ello se le llama "tiempo de reverberación", y tiene cifras: El tiempo de reverberación es el tiempo que tarda una onda sonora en atenuarse 60 dB, que equivale a una millonésima parte del nivel inicial.
Por tanto, es fácil deducir que mientras mayor sea la sala y menos absorbente su superficie, ese tiempo será más largo. Hay lugares en los que ese tiempo de reverberación puede durar mas de 5 segundos, con lo que ya estamos ante lo que se denomina ECO, que es el caso extremo de reverberación.
En una sala de 50 o 60 metros cúbicos (bastante comun) el tiempo de reverberación ha de ser inferior a 1,5 segundos, pero mayor de 0,5 segundos. Menos de eso tampoco es recomendable, porque en ese caso el sonido queda ahogado y poco natural.
Como en la mayoría de los casos resulta inviable modificar las dimensiones de la habitación, lo normal es que se manipule en el campo de la absorción de sus elementos, para ajustar los tiempos de reverberación. Lógicamente, cuanto más grande sea la sala, más absorción se necesita para obtener esos deseados 0,5 segundos. Esto se puede hacer perfectamente con materiales domésticos, sin tener que recurrir a los carísimos elementos que tratan de encasquetarnos los fabricantes especializados en eso que ya todos sabeis. Va una tabla, con materiales muy comunes, y su coeficiente de absorción en segundos. Los valores son por metro cuadrado de material:
UNA PERSONA= 0,4
MOQUETA O ALFOMBRA=0,8
PARQUET DE MADERA=0,03
SUELO SINTETICO=0,04
PARED DE CEMENTO O LADRILLO=0,025
PARED ENLUCIDA O EMPAPELADA=0,04
VENTANAS, CUADROS, ESPEJOS=0,03
CORTINA FINA=0,4
CORTINA GRUESA=0,55
UNA MESA=0,55
UNA COMODA=0,8
UN SOFA TAPIZADO=0,9
UN SILLON TAPIZADO=0,5
Otro factor son las ondas parasitas y estacionarias. Surgen cuando hay paralelismo entre los planos que forman la habitación: Paredes, suelo y techo. Cuando una onda rebota perpendicularmente a una de ellas, se crea un vaiven entre la superficie paralela, cuya duración puede ser muy larga y depende de la capacidad de absorción de dichas superficies. Se crea un efecto de "ping-pong" bastante desagradable de escuchar. Nuevamente se impone el uso de materiales absorbentes o de elementos que rompan el paralelismo, haciendo las superficies irregulares: Lamparas, cuadros, muebles...
Por último, hay que hablar de la resonancia: Es un fenómeno que se produce porque todos los objetos (incluida la propia sala) tienen una tendencia a oscilar(vibrar) a una determinada frecuencia. Esta frecuencia depende del material y de las dimensiones de dicho objeto.
Para evitar que la sala en sí resuene, hay una regla en acústica que da bastantes buenos resultados con los materiales comunes que se emplean en construcción. Es la siguiente: 1x1,6x2,5.
Por ejemplo: Para una altura de 2,40 metros, el ancho debería ser de 3,84 metros y el largo de 6 metros.
En cuanto a los elementos de la sala (muebles, cuadros, etc) hay que desacoplarlos, colocando piezas de goma bajo las patas de los muebles, masillas elásticas para los cristales en las ventanas, fieltro bajo los pequeños objetos... no obstante, bien es verdad que mientras más masivo sea un objeto más difícil es que entre en resonancia.
CONCLUSION/REGLA DE ORO: Tengan todos en cuenta que siempre sonará mejor un equipo mediocre en una sala con buena acústica que el mejor equipo del mundo en una sala mala. Esto, que parece una gilipollez, porque es harto sabida, no lo es tanto porque sabemos que muy pocos la tienen (tenemos) en cuenta... ¿O es mentira lo que estoy diciendo?. Que tire la primera piedra el que sea!!!...